El grafito como lubricante para cerraduras
El grafito como lubricante para cerraduras ofrece unos excelentes resultados. Es un mineral de carbono casi puro, de textura compacta, color negro y brillo metálico, graso al tacto y un buen conductor de la electricidad. Es una de las formas alotrópicas en las que se puede presentar el carbono en la naturaleza. Es un mineral muy conocido por sus amplias aplicaciones. Se utiliza principalmente para crear la punta de los lápices, así como en el desarrollo de materiales para la industria del acero, latón, bronce, lubricantes industriales y piezas de ingeniería.
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Propiedades del grafito
El grafito es blando, de color negro y gris con un brillo metálico, refractario y se exfolia con mucha facilidad. En la dirección perpendicular a las capas presenta una conductividad de la electricidad baja, que aumenta con la temperatura, comportándose pues como un semiconductor. A lo largo de las capas la conductividad es mayor y aumenta proporcionalmente a la temperatura, comportándose como un conductor semimetálico. Es uno de los materiales más inertes, siendo resistente a la mayoría de ácidos, bases y agentes corrosivos.
El grafito puede usarse:
- En la fabricación de crisoles refractarios en la industria del acero, latón y bronce.
- Como lubricante mezclado con aceites.
- El grafito como lubricante para cerraduras.
- Mezclado con arcilla para la fabricación de lápices-.
- Se utiliza en la fabricación de pinturas para la protección del hierro y acero.
- También en el desarrollo de piezas de ingeniería como pistones, juntas, rodamientos y arandelas.
- Moderador en reactores nucleares.
El grafito como lubricante para cerraduras, bisagras y otros engranajes
El grafito en polvo es un lubricante sólido que se emplea en cerraduras, bisagras, ejes y engranajes. No retiene el polvo y su durabilidad y resistencia son altas. Por otro lado, evita el desgaste de cualquier pieza metálica.
Es el mejor lubricante mineral sólido que se mantiene en estado puro. Se une instantáneamente al metal, goma, plástico y a la mayoría de los sustratos para formar una barrera repelente contra la suciedad. Protege y lubrica la superficie de presión y fricción, y resiste temperaturas de hasta 850ºF, así como presiones externas y ataques de agua y químicos.
Cuando una cerradura se atasca y no hay manera de conseguir que la llave gire se requiere un buen engrase para solucionar el problema. El grafito como lubricante para cerraduras es la mejor opción.
¿Cómo lubricar una cerradura con grafito?
Para lubricar una cerradura se utiliza grafito en polvo. Este producto es de color gris oscuro y brillo metálico. Se presenta en recipientes con aplicador que permiten que el polvo se adhiera al interior de la cerradura. De esta manera se limpia el mecanismo de la cerradura sin que esta se obstruya.
Una vez se aplica el grafito en polvo en el interior de la cerradura basta con introducir la lleva en la cerradura y darle varias vueltas al cerrojo. Los resultados son prácticamente inmediatos.