¿Cómo elegir un calefactor industrial?

A la hora de elegir un calefactor industrial debemos tener en cuenta diferentes factores. ¿Cuál es su finalidad? ¿Calentar espacios, secar paredes…? Otros factores a tener en cuenta es su potencia calórica, el volumen a calentar, si necesitamos combustión directa o indirecta, etc… Para que elegir un calefactor industrial te resulte fácil, en este artículo te vamos a explicar lo que debes tener en cuenta.

 

¿Qué es y cómo funciona un calefactor industrial?

Un calefactor o estufa industrial es un sistema de climatización de alto rendimiento especialmente indicado para grandes superficies y zonas de trabajo como obras, naves industriales, talleres, etc…

Se trata de calefactores que que logran elevar la temperatura de un modo que resultaría imposible con otros sistemas de calefacción tradicionales y además, lo hacen con el menor gasto energético posible. Son fáciles de instalar y ocupan poco espacio

El funcionamiento de un calefactor industrial es muy simple. Calientan el aires gracias a la electricidad o a un combustible formando conductos de calor que aumentan la temperatura.

 

calefactores industriales

 

¿Para qué se utiliza un calefactor industrial?

Su principal función, sobretodo en invierno, es la de calentar diferentes espacios como obras, talleres, naves industriales…. creando un ambiente óptimo y confortable para los trabajadores.

También existen otro tipo de calefactores que sirven para secar superficies como suelos o paredes, así como para secar inmuebles afectados por la humedad. En las obras públicas se utilizan para secar pavimentos antes de colocar el asfalto de una carretera.

Según los cálculos estimados, para calentar una superficie de entre 200-250 m2, serían necesarios 10.000Kcal/h de potencia. Aún así se ha de tener en cuenta que los valores kilocalóricos pueden variar en función del diferencial de temperatura y del aislamiento del espacio que se quiera climatizar.

Lo importante, a la hora de elegir un calefactor industrial, es tener en cuenta las medidas de la estancia, la temperatura externa y la deseada, y la clase de aislamiento.

 

 

Los diferentes tipos de calefactores industriales

Los calefactores industriales se pueden clasificar por diferentes aspectos, principalmente lo que hay que tener en cuenta es la fuente de energía que consumen. Por lo tanto los clasificaríamos en generadores eléctricos y generadores de combustión.
 

Calefactores Eléctricos

La fuente de energía que utilizan es la electricidad. Son aparatos altamente eficientes y que se pueden utilizar en diferentes aplicaciones. Suelen ser portátiles y ofrecen una climatización rápida, segura y limpia. Funcionan de forma sencilla a través de un cañón de aire que propulsa aire caliente a través de una resistencia de potencia variable que se regula según la superficie a calentar.

Los cañones de aire caliente suelen tener forma cilíndrica y su potencia varía aproximadamente de 1.5kW a 9kW. El ventilador dispone de diferentes niveles, el calentador cuenta con un termostato para garantizar un calor constante y un termostato anti-sobrecalentamiento. El flujo de aire oscila entre 400m3/h y 1000m3/h en función de la potencia.

Su principal ventaja es su sencillez de funcionamiento y su autonomía, perfecta para evitar las heladas y calentar diferentes estancias. La desventaja es que en el caso de los más potentes, funcionan con una corriente trifásica de 380V y se requiere suministro a través de un grupo electrógeno.

 

Calefactor elèctric Stanley

 

 

Calefactores de Combustión

Los calefactores de combustión utilizan como fuente de energía el gas o el gasoil. Dentro de este tipo de estufas podemos diferenciar entre combustión directa y combustión indirecta.

Calefactores de Combustión Directa

Son aparatos muy eficientes que producen grandes volúmenes de calor. Son perfectos para calentar áreas abiertas y bien ventiladas. Son potentes y los más pesados aunque son móviles ya que suelen llevar ruedas. En la construcción se suelen utilizar para que el hormigón no se congele o para calentar espacios de trabajo al aire libre. En cambio, en los lugares públicos y donde haya animales están prohibidos.

Su potencia varia de los 20kW hasta más de 100kW, y también disponen de un termostato. Se desaconseja su uso para deshumidificar espacios u obras, ya que la combustión produce humedad.

 

 

Calefactores de Combustión Indirecta

Proporcionan una calefacción silenciosa, sin humos y 100% seca en lugares cerrados o con poca ventilación y en los que haya una gran afluencia de personas. Son la mejor opción para espacios con ventilación limitada. Se pueden utilizar con mangueras que faciliten la distribución del aire caliente.

Se pueden poner en el exterior de la estancia a calentar. Están indicados para secar obras y para el deshielo. El flujo de aire es más potente, supera fácilmente los 5000m3/h. No obstante, su rendimiento es algo inferior, aproximadamente un 90%, aunque los más potentes pueden calentar volúmenes de hasta 1000m3.

 

elegir un calefactor industrial

 

¿Cómo calcular el volumen y la temperatura?

El volumen a calentar se expresa en m3 y se calcula multiplicando la superficie del suelo en m2 por la altura en metros.

No obstante, hay que tener en cuenta que los calefactores de obra se suelen utilizar en zonas abiertas, mal aisladas y que nunca tienen el mismo volumen. Por estos motivos, para hacer un cálculo de forma rápida hay que tener en cuenta que 1m2 requiere 100 Watts. Es decir, 1kW = 10m2.

La potencia de calentamiento se expresa en kilocalorías (Kcal), y la diferencia de temperatura entre el aire exterior y las zonas interiores tiene una relación aproximada de 1000 Kcal por 1 grado que se obtiene. Por ejemplo, para conseguir una temperatura de 18º en una obra ventilada, se requiere un mínimo de 18.000 Kcal.

 

 

Consejos para elegir un calefactor industrial

  • Determina la potencia calorífica (Kcal) en función de las temperaturas y volúmenes a calentar.
  • Escoge un calefactor de combustión indirecta para espacios con personas y/o animales, sino la mejor opción es un calefactor eléctrico.
  • Opta por un sistema de calefacción con características y potencia similar a un calentamiento ligero, y con un temporizador.
  • Ten en cuenta que los calefactores a gasoil y a gas son autónomos y no requieren una conexión eléctrica para funcionar (a excepción de los modelos con sopladores o aire forzado).