Cómo quitar el gotelé de las paredes fácilmente
Quitar el gotelé de las paredes no es algo difícil pero si laborioso por lo que nos va a llevar un tiempo. Aunque hace años era tendencia en las paredes de los hogares, hoy en día está en desuso. Así que si tus paredes tienen gotelé, a continuación te vamos a mostrar cómo quitarlo de una forma económica y sencilla.
Contenido
¿Qué es el gotelé?
El gotelé es una técnica de revestimiento de paredes y techos de gran popularidad hace algunos años. Consiste en recubrir la superficie con un tipo especial de pintura que ofrece un acabado texturizado.
Esta técnica de pintura tiene sus ventajas como por ejemplo, ocultar imperfecciones en paredes y techos. Sin embargo, hoy en día está pasado de moda y las tendencias actuales se enfocan más en paredes lisas que permitan la aplicación de diferentes revestimientos.
Además de una cuestión puramente estética, el gotelé está en desuso por otras razones como:
- Muchos revestimientos con gotelé antes de la década de los 80 contienen pintura a base de plomo o asbesto, materiales de construcción actualmente prohibidos por suponer un riesgo para la salud.
- El gotelé hace que el polvo y las telarañas se adhieran con mayor facilidad haciendo que paredes y techos sean más difíciles de limpiar.
- El acabado texturizado y grumoso del gotelé hace que el color de la superficie parezca desigual.
- Dificulta o impide la colocación de elementos decorativos en paredes, como los papeles pintados, vinilos, etc…
- Pintar superficies con gotelé es difícil y requiere cubiertas gruesas de rodillos y mucha pintura.
- Las sombras oscuras del acabado grumoso hacen que las habitaciones parezcan más pequeñas.
- Si se tiene que realizar alguna reparación sobre una pared con gotelé es difícil aplicar exactamente la misma rugosidad que tenía notándose después la falta de uniformidad.
Cómo quitar el gotelé de las paredes y techos
Lo primero que debes saber es el acabado que tiene la pared de la que quieres quitar el gotelé. Hay dos opciones: el acabado puede estar hecho con pintura plástica o al temple.
Para averiguarlo, lo mejor es mojar con un poco de agua la pared. Si ves que el agua se absorbe rápidamente está acabada con pintura al temple. En el caso de que el agua no se absorba, sino que resbala por la superficie, nos indica que el gotelé está acabado con pintura plástica.
Paredes acabadas con pintura al temple
En este caso, teniendo en cuenta que el gotelé se disuelve en agua, la mejor forma de quitar el gotelé de las paredes y techos es raspando.
El primer paso consiste en recubrir todos los enchufes y puntos de luz con cinta de carrocero para evitar que entre agua.
Seguidamente se humedece la superficie para que el gotelé se ablande. Para ello, aplica y distribuye lo más uniformemente posible agua por toda la pared utilizando un rodillo, brocha o spray. A medida que la pared vaya absorbiendo el agua irá cambiando de color, lo que indica que ya está lo suficientemente blanda para ser raspada.
Una vez el gotelé esté suficientemente húmedo, procedemos a raspar la pared con una espátula o rascador. Para ello, inclínala ligeramente y aplica un movimiento firme de abajo hacia arriba, teniendo cuidado de no clavar la espátula y dejar marcas en la superficie.
Por último, cuando hayas terminado toca corregir cualquier imperfección con masilla, sellar con una capa de imprimación y luego pintar la superficie del color deseado.
Paredes acabadas con pintura plástica
Para alisar las paredes con gotelé de pintura plástica, se suele utilizar una técnica que consiste en recubrir el acabado texturizado con una pasta o masilla especial que se adhiere a la pintura plástica.
El primer paso consiste en medir y calcular ya que para recubrir la superficie con pasta hay que determinar la cantidad que necesitamos. Mide la superficie y calcula los m2 totales. Por lo general, por cada m2 se requiere 1kg de pasta.
Seguidamente protege el área cambiando los muebles de habitación o cubriéndolos adecuadamente. Coloca también cinta de carrocero en interruptores de la luz y enchufes, así como en ventanas, puertas y zócalos. No olvides poner cinta de carrocero también la conexión de pared a techo.
El siguiente paso consiste en limpiar la pared. Este paso es muy importante siempre que se vaya a aplicar un revestimiento ya que si la superficie no está limpia puede pasar que el producto no se adhiera correctamente.
Una vez tengamos la superficie limpia ya podemos aplicar la masilla. En este paso es muy importante seguir las instrucciones del fabricante en cuanto a la preparación del producto y su aplicación. Lo puedes aplicar con rodillo pero siempre teniendo en cuenta que se debe realizar de la forma más uniforme posible.
Acabado:
Para un acabado perfecto, una vez el producto se haya secado, se procede a lijar las imperfecciones y eliminar el polvo con un paño limpio.
Una vez tengamos la pared lisa y libre de polvo, se procede a sellarla aplicando una imprimación. Finalmente pintaremos del color deseado.
Otra opción para quitar el gotelé de las paredes pintadas con pintura plástica, es que en lugar de utilizar masilla, aplicar un decapante para relieves que hará que se ablande la pintura y podamos quitar el gotelé rascando con una espátula. Una vez retirado, procederemos al masillado y lijado de las imperfecciones.