Cómo ahorrar agua de forma inteligente

Estamos viviendo unos momentos en los que ahorrar agua es esencial. El agua es uno de los recursos más importantes del mundo. Ya son muchos los países que sufren una grave sequía, que según las expectativas, no hará más que empeorar en los próximos años, conduciendo en última instancia, a la desertificación.

Se prevé que las temperaturas medias mundiales seguirán aumentando, alejándonos cada vez más del clima al que estábamos acostumbrados. Esto tendrá repercusiones de gran alcance para la salud, la seguridad alimentaria, la gestión del agua y el medioambiente. Por ello, es muy importante ser consciente del consumo de agua que estamos realizando, incluso a la hora de regar nuestras plantas, jardín o huerto.

 

Ahorrar agua utilizando el agua de la lluvia

Aunque las lluvias son cada vez más escasas en estos últimos años, poder aprovechar el agua de la lluvia te ayudará a reducir el uso de agua del grifo, ahorrarás dinero y tus plantas también te lo agradecerán gracias a su bajo contenido en cal. Puedes utilizar un depósito con tapa para proteger el agua de la contaminación y también evitar que los mosquitos pongan sus huevos ahí.

 

Riego gota a gota

Las plantas absorben el agua a través de las raíces. Aquí es precisamente donde actúan los sistemas de riego inteligentes, haciendo que el agua llegue directamente a las raíces gota a gota. Los sensores miden los niveles de humedad del suelo. Si este ya contiene suficiente humedad, se suspende el siguiente riego programado, lo que reduce considerablemente el consumo de agua.

 

Cómo ahorrar agua con riego por goteo

 

Consejos para regar de forma inteligente y ahorrar agua

Ahorrar agua no va a perjudicar para nada el crecimiento de tus plantas. Todo lo contrario, regar con regularidad utilizando el agua exacta que se necesita da como resultado un mejor crecimiento de las plantas y una mayor cosecha. Esto se debe a que el riego específico de las raíces reduce las enfermedades de las hojas, los hongos y la podredumbre, al mismo tiempo que erradica las malas hierbas ya que no se riegan durante el proceso.

 

Ahorra agua distribuyendo el agua de manera uniforme

La mayoría de plantas necesitan ser regadas de manera uniforme, así que asegúrate de dar suficiente agua a todas las raíces en lugar de humedecer la superficie. Este simple gesto te permitirá ahorrar agua de manera considerable.

 

Riega en el momento adecuado del día

Por la mañana, bien temprano, es el mejor momento del día para regar tus plantas. La tierra se calienta durante el día pero se enfría durante la noche, por lo que el agua se evapora menos por la mañana. El regar por la mañana, también les da a las plantas mucho más tiempo para absorber el agua haciendo que tengan la suficiente fuerza para afrontar el día que tienen por delante, sobre todo en verano.

 

Riega abundantemente

Es mejor regar las plantas una vez a fondo que regarlas de vez en cuando. De esta manera, el agua puede penetrar en las capas más profundas de la tierra llegando a todas las raíces. Dependiendo del clima, puede ser suficiente regar algunas plantas pocas veces a la semana.

 

Mantén las hojas secas

Las hojas mojadas son más propensas a sufrir enfermedades. Las infestaciones de hongos pueden ocurrir si las hojas se dejan demasiado húmedas durante la noche.

 

Evita encharcamientos

Asegúrate de que tus plantas tengan suficiente agua pero no las ahogues. El riego excesivo corta el suministro de oxígeno a las raíces.

como ahorrar agua

Utiliza aguas blandas

El bajo contenido en cal del agua de la lluvia la hace ideal para regar las plantas. No solo te permite ahorrar agua, sino que además tus plantas estarán más saludables.

 

Agrupar las plantas para ahorrar agua

Agrupar las plantas según sus necesidades permite llevar a cabo un riego más eficiente. Los programadores modernos se pueden configurar para diferentes zonas de riego y métodos de riego.

 

Plantas regionales

El cultivo de plantas autóctonas requiere menos esfuerzo, fertilizantes, pesticidas y agua. Las variedades antiguas adaptadas a las condiciones locales son más adecuadas que los cultivos híbridos globales supercriados. No obstante, hay otras plantas cultivadas localmente que se han adaptado al clima doméstico.

 

Ahorra agua regando uniformemente alrededor de la planta

Regar uniformemente alrededor de la planta para un sistema radicular equilibrado y bien desarrollado. Regar siempre en un solo punto de la raíz conduce a un crecimiento unilateral de las racíces y por lo tanto, a una peor absorción de nutrientes en el suelo. Por lo tanto, riega siempre alrededor de la planta y distribuye en toda el área de riego.

 

Utiliza tierra arcillosa de calidad para una mejor retención de agua

El suelo vegetal rico en minerales arcillosos tiene mejores propiedades de expansión y por lo tanto, puede retener mejor el agua en el suelo y de manera más uniforme. En veranos húmedos y en invierno, asegúrate de que el drenaje del agua sea óptimo para evitar encharcamientos.

 

 

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